miércoles, 18 de octubre de 2017

El miedo atrapa

Siempre quise ser fuego,
dejar atrás las cenizas
de un pasado,
que me quemaban
como mis lágrimas.
Siempre quise ser libre,
como mis palabras.
A veces me noto atada,
asfixiada
y tenía miedo de explotar.
Ya no podía más;
decía mi cabeza.
A veces escapar,
me llamaba.
Pero siempre volvía,
a los brazos
de quién me amaba
y ahí estaba mi hogar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Una cura para el corazón

 No me fui, quizás si. Pero aquí estoy, intentando sobrevivir. Renaciendo de nuevo o casi, como duele cuando te rompes. Te ahogas quieres gr...